Ayer con mis amigas nos perdimos

Ayer con mis amigas nos perdimos. ¿Qué es perderse? ¿No encontrar la salida? Qué pretencioso y absurdo el uso del singular. La salida. Como si hubiese una sola. Después de un tiempo de tormentas, anoche volvimos a salir. Presentación de un libro y tortilla de papas. También salimos de san telmo y de repente, como ocurre con el amor, estábamos en Parque Patricios, un barrio inhóspito de Bs As. ¿Cómo llegamos acá? Tiene que haber una salida. ¿Una sola? Somos tres mujeres, tres bocas pintadas en la noche oscura que mezcla el Invierno con el Miedo. ¿O son la misma cosa? ¿Se puede salir del miedo? Hay que pasar el invierno. Ni un tachero al que preguntarle. Aguante Uber. A ver esos "trapito". A medida que bajamos la ventanilla les vamos viendo las caras de ¿felicidad? ¿Estamos más perdidas que lindas? ¿Que es lo que miran así, pretendiendo meter sus pupilas dentro de las muestras? El dato erróneo que nos dan nos cuesta un cigarrillo y cinco pe. Gracias chicos. ¿Se sacaron la gorra? ¿Nos hicieron una reverencia? Los vemos entre las sombras por el espejo retrovisor. Zalameros aduladores mangueros. Más noches que la luna, una luna llena cada uno tenían. Estar en camino conocido nos devuelve al mundo de las risas. Cacatúas, locas, dementes. Estallidos de hormonas. Me salieron granos en la frente. Yo me tengo que cortar el pelo. El obelisco, el emblema argentino del falo, nos silencia. La calma nos dura toda la Nueve de julio. La autopista ya no, me pasé. Córdoba. No podes ser tan desorientada. Me dijo que no me ama. Es un neurótico. Me voy a poner botox acá y acá. Ni en pedo me toco la cara. Deberías. Mala. Un poco, los párpados. Hacemos risas que se renuevan con chistes idiotas. Alaridos. Y entonces Sentimos la magia. Tres amigas, un auto, la noche. Ya nadie habla de la punción de médula, los hematocritos, los chabones que nos maltratan, ya no. Ya basta. Solo nosotras y el saber que estamos juntas. Tocamos el silencio y nos devoramos al miedo. Mira si iba a estar enferma. Los médicos son humanos, se equivocan. ¿Qué onda un novio médico? El sueño de mi vida. Salvajes y pasionales nos deglutimos las bromas que incluyen la palabra tragar. Somos soeces y tontas, pavotas, siempre enamoradas. Las mas Crédulas. A veces solo la vulgaridad y la poesía nos salvan. Vamos llegando. ¿Esta es la salida? ¿Ya nos tenemos que despedir? Lo hacemos sin decir que le ganamos a la noche la luna los trapitos y, por un rato, a los varones. Tampoco decimos que no es el primer diagnóstico terrible al que le hacemos pito catalán ni que nos quedamos sin rímel o caramelos ni que la unica razón por la que no estamos borrachas es porque no nos alcanzaba para dos vinos. Y Tampoco decimos que perdernos puede servir para comprobar que estando juntas eso no pasa. No, no lo decimos. Chau puton. Chau potras. Las amo. Yo también. Avísame cuando llegas. Vos tambien. Yegua. Loca. Te quiero forra. Yo más.